Nació un 20 de Mayo de 1958.. día lluvioso, con truenos y mucha hambre en la ciudad..
Hambre de paz, hambre de justicia.. todo era guerra a su alrededor.
Difícil mundo para Juliera.. pero lo que había mamado en la panza de su madre la haría fuerte para poder soportar las desdichas que la vida le obligaba a vivir, o eso creía.
Creció en medio de tiros, explosiones, bombas, sangre y gritos, y más, y más, y más gritos.
¿Cómo esperar que sea una niña feliz? ¿Cómo esperar que alguna vez el mundo conociera sus dientes? ¿Cómo esperar?
Una primaria mala, con buena educación.
No existía, en ese momento, una escuela que le enseñe a vivir.
Qué fácil hubiera sido para la niña Julieta.
Pero frente en alto y adelante .. adelante.. contra la pared.
Unos, dos, tres, cuatro y cinco golpes.. ¿qué podía esperar de la vida?
Ya le había dejado varias marcas.. y muy duras.
La vida parecía un sacramento.. del cual nunca se podría olvidar.
Caminaba todas las tardes por las calles de su barrio, olvidaba el tiempo, casi ni existía para ella.
Amaba el otoño, repasaba con los ojos las hojas de los árboles, pateaba las hojitas y las veía caer y flotar en el aire, y se olvidaba de todo, sólo se concentraba en dedicarle ese segundo a esa hojita.
Un día es secuestrada. (1978)
No sabe dónde está, mira a su alrededor y sólo ve paredes frías, gritos (otra vez), caos, muertes y violaciones.
¿Cómo olvidarse? ¿Cómo borrarlo de su memoria para siempre? Cuando creció, ella escuchaba que decían "nunca olvidar, siempre recordar", ¿acaso no la entienden?
¿Acaso no entienden que lo que más quiere en su vida es olvidar, borrarlo todo, sacarlo todo y que no le quede nada?
Quiere volver a vivir, renacer. No la dejaron antes, y no la dejan ahora.
¿Qué se piensan.. que son dueños de su vida? Déjenla decidir a ella. Déjenla vivirse.
Sólo es un alma en el olvido.
Nadie recuerda su nombre..
"Juuu.. ju.. liana?", "juuu.. juu..lia?" “No, soy Julieta! vamos! no es tan difícil! ¿O si?”.
Y hoy, sólo es un alma en el olvido y la vida la vive.
Pensó que su madre, desde el cielo, la ayudaría, que le daría la fuerza necesaria.
Pero claro de la tierra al cielo hay miles de kilómetros...
Y del cielo no llega la fuerza.
No llega el amor.
(Creado un 20 de Junio de 2006).-